
La esteta tamaulipeca habla de cómo llegó a los cuadriláteros y de su vida bajo los encordados; “la batalla más difícil que tuve fue cuando gané el Campeonato Extremo MWE”, relata
¿Qué somos si no es que simples entes que buscan subsistir? Su padre fue el culpable de que ella, Heroína, tuviera su primer contacto con la lucha libre. Luego, ella misma se encargó de fortalecer su cariño por este deporte. Hoy, a sus 27 años, la joven esteta pica piedra en los encordados independiente, en ocasiones de las zonas más recónditas del país.

La Arena Naucalpan, Arena San Juan Pantitlán, Arena Femenil de Monterrey, Arena Gladiador de Matamoros, Arena Coliseo de Reynosa, han sido su nicho, como el de muchos luchadores independientes que por una u otra razón se ganan la vida lejos del cobijo de las grandes empresas que dominan el pancracio nacional.
No obstante, a Heroína, fue una voz procedente de una de esas grandes marcas lo que la llevó a dar los primeros pasos en la disciplina.
“La lucha llegó a mi vida porque mi papá es muy aficionado y todos los domingos me sentaba con él a ver las luchas. Se me hizo costumbre, hasta que un día llegó Triple A a mi ciudad y me llevaron; quedé muy fascinada. Recuerdo que cuando tenía 19 años fui a una función local y me tomé fotos con uno de los luchadores, quien me hizo el comentario de que por qué no me daba una vuelta por el gimnasio municipal para tomar clases y me animé”, relata la oriunda de Ciudad Victoria, Tamaulipas.
Madre soltera, la última de una familia de cuatro hermanos, hija de padre trabajador en una empresa de lonas y una madre dedicada a los bienes raíces; Erika Pérez Caballero, su verdadero nombre, corresponde a ese cúmulo de jóvenes que por una u otra razón se han dedicado a la lucha libre, con todas las vicisitudes que su contexto le exige.

“Al ser de las pocas mujeres que en mi entorno optaron por la lucha, nunca recibí ninguna consideración, me trataban igual que a los demás, eso me ayudó a la larga. Además, al ser mamá soltera, tenía que trabajar 12 horas diarias para llevar dinero a mi hogar y después llegar a entrenar y atender a mi familia, a eso hay que añadirle que nunca faltan los compañeros irrespetuosos, los promotores y aficionados que pretenden rebasar ciertos límites, pero aprendes a tratarlos con el tiempo”, comparte.
Además, la esteta tamaulipeca, en un inicio, tuvo que cargar con esa pesadez que las decisiones de un hijo generan a una madre, como el sufrimiento y la zozobra.
“Mi mamá no está de acuerdo, pero creo a ninguna madre le gusta ver a su hija maltratada, aunque mi papá sí está feliz, no digo que le guste verme mal, pero él sabe que es algo que disfruto demasiado”, declara.
Y es que no es para menos, Heroína no sólo escogió ser luchadora, el estilo que defiende incluye rudeza, clavos, sillas, escaleras, mesas, entre otros; sin embargo, en este empedrado terreno, ha sabido cosechar ya glorias importantes y también descalabros.
“La batalla más difícil que tuve fue cuando gané el Campeonato Extremo MWE. Me enfrenté en una jaula ante un luchador muy experimentado. Hubo fuego, bats, lámparas, quedé muy lastimada durante muchos días. La segunda fue contra Drako, donde al contrario de la primera, no salí con las manos en alto, pero la experiencia fue increíble”, expone.
Y si bien la norteña deja claro que se enfoca más en el presente que en el futuro, por el momento se encuentra inmiscuida en una fuerte y prometedora riña con dos estetas independientes, la cual pinta para un exquisito desenlace.
“Tengo un problema muy fuerte con Lilith Dark y Demonio Infernal, pues se han estado entrometiendo de más en mi trabajo y es algo que no pienso dejarlo pasar”, asevera.

SIDE:
Sueño pendiente
Heroína, a quien siempre le inculcaron la lucha libre, tuvo como ídolo de infancia a La Parka, con quien, sueña con compartir el escenario.
“De niña mi ídolo era La Parka, tengo el gusto de conocerlo, más no de haber trabajado con él, ojalá algún día se me dé”, compartió la esteta, al mismo tiempo que aconsejó a los jóvenes que quieren dedicarse a la lucha libre, a que nunca desistan.
“Nunca abandonen el sueño, nunca se rindan, aunque las cosas se pongan pesadas, fuertes y complicadas, no lo abandonen, busquen siempre el modo de continuar haciéndolo. Todo esfuerzo tiene recompensa”, declaró.
PERFIL:
Erika Pérez Caballero
Fecha de nacimiento: 27 de mayo 1992
Edad: 27 años
Peso: 75kg
Estatura: 1.70 m
Debut: 14 de julio de 2012
FRASES:
“Sacrifico todo momento familiar, dejar mi ciudad natal por seguir un sueño, llevar una vida como todas las chavas no me fue posible porque estaba demasiado cansada para salir, porque mi trabajo me exige los fines de semana, pero todo tiene recompensa”
DATO:

“Uno de los momentos más triste de mi carrera fue cuando Magnífica perdió su cabellera. Sé que es una excelente luchadora y me partió el alma ver a sus hijos sufrir con ella”
Heroína
Luchadora profesional
Heroína, actualmente, posee el Campeonato Extremo MWE, el cual obtuvo en 2018, además ostenta el campeonato extremo de la Arena Femenil de Monterrey, que ganó el 15 de julio del presente año.