Por: Juan Carlos Barrera Márquez
En la primera parte de este artículo, hablamos en qué situaciones no es recomendable el uso de las fajas colombianas. Asimismo, especificamos dos pruebas con ejercicios básicos que de aprobar te avalan como una candidata óptima a utilizarlas.
En esta última parte, nos adentraremos en el gran tema de la “deformación de estructuras blandas o susceptibles”, la gran discusión del “reacomodo de órganos”:
De la manera más curiosa e irónica, este tema en especial pasa a ser el VERDADERO OBJETIVO del uso de este tipo de herramientas, me refiero a que; si ya llevamos cierto tiempo con una buena dieta en donde vamos regularmente al baño, de manera adecuada y no hay presencia de situaciones inflamatorias, tenemos un buen plan de entrenamiento el cual nos ha dotado de un eficiente desarrollo muscular en la zona abdominal y cubrimos satisfactoriamente las pruebas propuestas.
La deformación y reacomodo de órganos ¡Es lo que se busca! Sé y entiendo que suena irreverente ,PERO démonos un momento para procesarlo.
La estructura de la mujer mexicana es compacta, cuadrada, el objetivo de “acinturarnos” (reducir la cintura) es el de provocar un fenómeno visual, ya sea en competencias estéticas o ante la cámara en una sesión de fotos o en eventos de gala, de que se tienen piernas , glúteos más grandes, un cuerpo más armónico, más atractivo para los estándares y estereotipos actuales.
El hecho de reducir la capacidad de “almacenamiento momentáneo” de algunos órganos como el estómago y el colon nos viene bastante bien en dietas restrictivas que son muy típicas previas a los eventos mencionados en donde se desea-requiere presentarse con la mejor forma física-estética.
Es crucial mencionar los principales “detalles y gajes” de esta práctica:
1) El uso de las fajas moldeadoras es un fenómeno de adaptación bi-direccional, esto quiere decir; que tanto el cuerpo se va a adaptar (moldear) a las presiones ofrecidas por la faja como también el material del cual están hechas estas fajas va “dar de sí”, “se va a aflojar”, se va a deformar a su vez a la resistencia que también le ofrezca el cuerpo, esto es muy importante de entender ya que justifica un punto vital en el éxito de que las fajas realmente ofrezcan un beneficio, y este es:
¡LA FAJAS SON DESECHABLES! Van a durar lo que ambas partes tarden en adaptarse simultáneamente, lo cual tarda (dependiendo de la persona) en promedio de 1 a 2 meses, por lo tanto, en este proceso de recomposición corporal, por no decirle deformación del cuerpo, usted tendrá que comprar cada mes o dos meses una faja nueva hasta llegar al objetivo deseado y aun así una vez alcanzado, volver a comprar la misma talla para estar reforzando ese “punto de control”.
2) Recuerde evitar situaciones inflamatorias; si se está en sus días, se percibe inflamada o estreñida no la use, espere a que pasen esas sensaciones y vuélvasela a poner.
3) El tiempo adecuado de uso deberá ser acorde a las adaptaciones de cada persona en eventos separados, tendrás mejores y rápidos beneficios si comienzas con 20 minutos a 40 minutos en dos horarios distintos de su día.
4) El tiempo máximo recomendado en el uso de faja es bajo la condición de estar despierta, dicho de otra manera la faja jamás se debe de usar para dormir.
La faja jamás se debe de usar para dormir, esto debido a que el cuerpo para recuperarse y restablecer ciertas funciones fisiológicas requiere de estar libre de las presiones, características de la faja.
5) Procure comprar dos versiones distintas de fajas de la misma talla para que le dé tiempo de orearse, limpiarse y sobre todo tarden más en adaptarse las fajas a su cuerpo, es decir; aumentar el tiempo de vida útil de la faja.
Si al final de este artículo decide usar este tipo de herramientas tan habituales en el medio del fitness y los gimnasios solo me resta decirle
Respete y escuche a su cuerpo, el pensamiento “cortoplacista” no lo llevara a ningún lado y pondrá en riesgo su salud
Si bien las modelos y competidoras fitness usan este tipo de herramientas debe comprender que no hay magia en esto, al contrario hay todo un trasfondo inmenso de disciplina, cuidados, inversión económica y de tiempo que van más allá de pensar que con una faja basta para lograr el cuerpo que se quiere.
Esto solo es un elemento más del basto abanico de estrategias que se utilizan en la recomposición corporal.